Leyendas de Estados Unidos

A lo largo de todo los Estados Unidos podemos encontrar infinidad de leyendas en cualquiera de sus ciudades y entre ellas podemos destacar:

Los faros malditos de Maine

Dicen que el faro es perseguido por el fantasma del pescador Howard Hobbs, quien disparó y mató a su casero Fred Milliken en 1896, o sea, la historia cuenta que Hobbs y su compañero de cuarto, William Moses, habían estado bebiendo mucho cuando Milliken pidió hablar con ellos sobre su renta vencida.

Como consecuencia de esta discución, Hobbs disparó a Millikin en el pecho, para después ir él mismo al interior del faro de Wood Island para suicidase.

Después del suicidio, los guardianes que vivían en el faro comenzaron a realizar informes afirmando ser testigos de que escuchaban gemidos y veían sombras de forma inexplicable.

En 1972, se eliminó la luz del faro, negando la necesidad de que cualquier guardián viviera dentro de la luz embrujada.

Hay otra leyenda sobre otro faro en Maine, el de la isla Seguin, o sea, a mediados de 1800, el faro estaba habitado por un cuidador y su esposa que para combatir el aislamiento solitario de la isla, el cuidador así hizo que enviaran un piano para mantener ocupada a su esposa.

Sin embargo, una vez traido el piano al faro resulta que su mujer solo sabía una canción pues la tocaba sin cesar y al final, como el cuidador no pudo aguantar más, se volvió un poco loco destruyendo el piano con un hacha, luego mató a su esposa y, finalmente, a sí mismo. Hoy, la gente local afirma ser testigo de haber escuchado la canción solitaria proveniente del faro.

El fantasma de Canyon Hill

Dicen que cuando se estacione entre los árboles frente al cementerio de Canyon Hill en Idaho, verá un «corredor de medianoche» que se acercará y tocará la ventana de su automóvil, o sea, «Midnight Jogger», como llaman al fantasma, es una mujer, y aparentemente no tiene piernas y solo está flotando en el aire, desplazándose a gran velocidad.

El cementerio de Canyon Hill está en el 2024 North Illinois Ave en Caldwell y además de la presencia del «Midnight Jogger» dicen que aparece una anciana que se sienta en el banco después de la medianoche, mirando de forma espeluznante al que la vea y mucha gente dice que han mirado hacia otro lado por un segundo y cuando miran hacia atrás, ella se ha ido.

El cementerio de Canyon Hill se remonta a principios de 1800 y tiene víctimas de asesinato, suicidios pues hay una mujer enterrada junto a sus cinco hijos que supuestamente todos ellos se ahogaron.

Otras razones por las que la gente piensa que el cementerio está embrujado son así la evidente caída de temperatura en el momento en que pones un pie en los terrenos del cementerio, o bien ese fuerte olor que nadie puede explicar y parece que todos los que entran tarde en la noche, solos, siempre tienen esa sensación espeluznante de que alguien más está contigo, vigilándote.

El puente del Infierno

A mediados del siglo XIX, el municipio de Algoma, Michigan, estaba siendo atormentado por una fuerza desconocida, o sea, durante unos días, hubo unos niños que aparentemente habían desaparecido en el bosque y al ver que no regresaban la gente del pueblo formó un grupo de búsqueda para poder pues localizarlos.

Los niños que aún no habían desaparecido se quedaron con Elias Friske, un hombre amable y anciano que era adorado por muchos de los ciudadanos de la ciudad.

El grupo caminó por el bosque durante muchas horas, buscando a fondo a los niños desaparecidos hasta que un hombre encontró la horrible razón de por qué los niños habían desaparecido.

El hombre llegó y escuchó a alguien murmurando, justo detrás de un árbol yacía Elias Friske, meciéndose, sosteniéndose la cabeza, o sea, justo delante de él había un puente, donde estaba ahogando a los niños bajo el agua.

Había atado una cuerda alrededor de sus cinturas para mantenerlos juntos, por miedo a perder a más niños de la ciudad y tras ser encontrado, éste susurró: «el diablo me obligó a hacerlo».

Algunos creen que él fue el motivo de que todos los niños desaparecieran, pero otros creían que era inocente y que un espíritu malévolo se aprovechó de la juventud de la ciudad.

De todos modos, Elias Friske fue colgado del mismo puente como retribución por la pérdida de los niños bajo su cuidado y la historia dice que las aguas subieron esa noche, la cuerda se rompió y el cuerpo de Elias fue arrastrado al infierno.

Los testigos afirman haber visto caras de niños debajo de la superficie del agua o manos agarrándose desde las profundidades y otros han oído risas y lamentos.

Fuente: https://www.misteryinternet.com/2020/08/algunas-leyendas-cortas-de-los-eeuu.html

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