El fantasma del pozo

El fantasma del pozo

En Pedroche, hay un discreto pozo que esconde grandes secretos ya que según la tradición lo convierte en una de las construcciones más misteriosas de la zona.

Corría en la península el año 709, y en la corte toledana del rey visigodo Don Rodrigo destacaba por su notable belleza una joven llamada Florinda que era hija del poderoso conde Don Julián, gobernador de Ceuta, quien la había enviado a la capital del reino.

Un día, Don Rodrigo fijó sus ojos en ella y se le comenzó a insinuar, pero ante la resistencia de la chica, el interés del soberano fue en aumento y en un intento desesperado por lograr que accediera a sus deseos llegó a ofrecerle matrimonio, lo que la convertiría en reina, pero la muchacha siempre se mantuvo firme en la convicción de preservar su pureza.

Como consecuencia de la reticencia de la joven, entonces el rey ordenó pues que la condujeran hasta su alcoba, y allí acabó abusando de ella sin compasión.

De esta relación no consentida quedaría embarazada, viéndose obligada a contraer matrimonio contra su voluntad y a partir de ese momento, la vergüenza que le angustiaba quedaría reflejada en su rostro, o sea , pasaría a ser conocida como la reina Cava.

Desesperada, decidió mandar una carta a su padre revelándole el desagravio, al que éste respondería con una terrible venganza, o sea, de inmediato contactó con los líderes bereberes del Califato Omeya y así les ofreció su ayuda para arrebatar la península ibérica al rey que había ultrajado a su hija.

En el año 711, el despechado Don Julián facilitó a los ejércitos musulmanes atravesar el Estrecho, o sea, el abrir de par en par las puertas del reino de Toledo.

Junto a los invasores, el gobernador ceutí combatió con furia a las tropas de Don Rodrigo, sometiéndolas de forma aplastante en la batalla de Guadalete u después degollaron a todos los miembros de la estirpe goda, incluyendo a su nieto, el hijo de la desgraciada Florinda.

Mientras avanzaba la conquista musulmana, de la que su padre se había convertido en pieza clave, la reina Cava se refugió en el castillo de Pedroche, en la provincia de Córdoba.

Allí pasaría recluida el resto de sus días, estigmatizada por la culpa, sintiéndose entonces responsable de la destrucción del reino y según la leyenda, cada noche salía al patio de la fortaleza, y asomándose así al borde hexagonal de un pequeño pozo, lloraba amargamente la muerte de sus correligionarios y su hijo.

Como consecuencia de todo ello, una noche, no pudiendo soportar más su desdicha, decidió acabar con todo y se lanzó de cabeza al interior del pozo con todas sus joyas.

Lo más sorprendente es que varios siglos después, multitud de pedrocheños comenzaron a informar de la aparición al filo de la madrugada de una mujer desgreñada, con aspecto desquiciado, que entre salvajes carcajadas se encaramaba al brocal de la pequeña fuente y hundía su inquietante mirada en su oscuro fondo.

Luego, sin prestar la menor atención a los atónitos testigos, se daba media vuelta y huía sin dejar rastro y debido a ello, durante largo tiempo, los vecinos se encerrraban en sus casas al caer la noche, por miedo a encontrarse con este ser espectral que embriaga de miedo y tristeza a quien tiene el infortunio entonces de cruzarse en su camino.

Incluso en tiempos recientes, algunos habitantes del municipio admiten así haber visto el fantasma de la Cava, emergiendo desde el fondo del pozo como un cadáver putrefacto, para seguidamente volver pues a sumergirse en sus turbias aguas.

Fuente: https://www.diariocordoba.com/zoco/2019/01/27/fantasma-pozo-36290926.html

Related Post

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.