El mensaje satanico de Maria Crocifissa della Concezione
Isabella Tomasi nació en Italia en 1645 y cuando Isabella tenía 15 años se hizo monja, o sea, entró como hermana en el convento de la Benedicción de Palme di Mantechiaro (Sicilia, Italia), donde fue bautizada y rebautizada como Maria Crocifissa della Concezione para convertirse en Sor Maria Crocifissa.
Pronto, Maria comenzó a demostrar una personalidad un poco diferente a las demás monjas, o sea, solía decir a sus hermanas del convento que el Diablo la poseía ya creía plenamente que el Maligno intentaba constantemente que le diera la espalda a Dios y que su objetivo era obligarla a pecar contra su voluntad e incluso confesó que oía la voz del Diablo susurrándole.
Durante los 16 años que Sor Maria Crocifissa estuvo en el convento, las monjas fueron testigos así de un comportamiento inexplicable en ella. Ejemplo de ello es cuando, al acercarse al altar del convento, resulta que gritaba como si tuviera miedo de algo que sólo ella podía ver y en seguida se desmayaba.
El 11 de agosto de 1676, María, de 31 años, fue encontrada desmayada en el suelo de su habitación, pues su cara estaba manchada de tinta negra y en su mano había una carta y además describieron que estaba en una especie de trance del que salió de repente.
Exhausta, Maria dijo que Satanás la poseyó y le hizo escribir una carta en contra de su voluntad escrita así con una extraña mezcla de glifos rústicos y antiguas letras latinas, griegas, y árabes, pues también había algunos símbolos ocultos, o sea, el mensaje era completamente ilegible.
El mensaje compuesto por 14 renglones, titulado La Lettera del Diavolo, fue descifrado por un grupo de investigadores del Museo de Ciencias de Ludum, en Sicilia, gracias a un programa computacional que se encuentra disponible en la deep web.
El equipo también hizo un análisis sobre los registros históricos que relatan la vida de la monja para así descubrir más sobre la “poseída” pues, de acuerdo con el museo, cuando se trata de criptografía histórica, no se puede dejar de lado el perfil psicológico del creador del mensaje.
Los investigadores encontraron que el nombre de pila de Maria Crocifissa della Concezione era Isabella Tomasi, y que ingresó al convento a los 15 años de edad.
El equipo sospechaba que el mensaje había sido escrito en alguna clase de lengua simplificada o quizás en un código elaborado por la monja a partir de letras y palabras de alfabetos de la antigüedad, como el arábigo, rúnico y griego.
En primer lugar, para decodificar el mensaje, los investigadores del museo hicieron pues un análisis de la repetición de las sílabas y grafías presentes en el texto para identificar las vocales y, a partir de aquí, pues aplicaron un algoritmo para refinar la decodificación del contenido. De hecho, el personal del museo así esperaba descubrir el significado de algunos símbolos sueltos, nada que tuviera mucho sentido.
Sin embargo, para sorpresa de los investigadores, la monja poseía pues un buen dominio sobre alfabetos antiguos, lo que permitió a los investigadores encontrar un sentido en los fragmentos decodificados.
Esencialmente, el texto contiene una serie de divagaciones y, por eso, algunas partes resultan entonces incomprensibles pero, con estas letras, Maria acusaba a la Santísima Trinidad, o sea, Dios definido a través del Padre, el Hijo y el Espíritu Santo de ser “pesos muertos”.
La monja incluso hace referencia a algo sobre que Dios cree que puede liberar a los mortales, pero que el sistema no funciona para nadie, y que tal vez el Estigia sea verdad. De acuerdo con los investigadores, en la mitología grecorromana este es el nombre del río que separaba al mundo de los vivos del inframundo.
En aquella época, el texto fue considerado por la Iglesia como una prueba del embate que hicieron pues incontables espíritus del mal contra la monja, incluso existen registros de que estas fuerzas malignas pues intentaron obligar a la mujer a firmar el mensaje. Sin embargo, la monja logró oponerse de forma heroica a las demandas de los espectros y regresar a los brazos del señor.
El personal del museo sospecha que la pobre mujer quizá padecía esquizofrenia o trastorno bipolar y que gracias al gran dominio de los diferentes idiomas es posible que se «podrían haber mezclado en su mente de forma involuntaria» durante la escritura epistolar.
Fuente: https://es.gizmodo.com/descifran-la-carta-de-lucifer-el-mensaje-cifrado-del-1803773284