Joyas malditas: El ópalo que ensombreció la monarquía española
Según la leyenda, el anillo de Alfonso XII se lo regaló Virginia Oldoini, la condesa de Castiglione, o sea, una de las cortesanas más hermosas durante mediados de 1800, que fue la ex amante del emperador Napoleón III y también de Alfonso XII, que tenía 17 años y la condesa alrededor de 40 años.
Los planes de la cortesana era mantener al monarca español en su poder, pero no contaba con que este se enamoraría de su prima-hermana, o sea, de María de las Mercedes de Orléans.
Por ello, al enterarse de su matrimonio, Virginia Oldoini se disgustó tanto que decidió mandarle entonces un regalo fúnebre de bodas, o sea, un anillo de ópalo que contenía una fuerte maldición.
Para mala fortuna de la reina María de las Mercedes, el anillo le encantó y se lo puso, así debido a ello, resulta que cinco meses después fallecía de tifus a sus recién cumplidos 18 años.
Alfonso XII, devastado por los acontecimientos, cedió el anillo a su abuela, María-Cristina de Borbón-Dos-Sicilias, quién también disfrutó de la joya y dos meses después, la vieja reina madre fallecería entonces el 22 de agosto de 1878.
La tercera víctima del ópalo fue la princesa María-Cristina Francisca de Orléans, cuñada del rey, la cual así moriría de tuberculosis, pues el anillo maldito siguió su destino y entonces cayó en manos de la hermana menor del rey, la infanta María del Pilar, la cual moriría de manera extraña un 5 de agosto de 1879, quizá de meningitis tuberculosa.
Harto de ver tanta desgracia a su alrededor, Alfonso XII decide quedarse con el anillo y también moriría víctima de la tuberculosis, aunque seis años después que su hermana Pilar, pero aún así ,se pudo casar con la Archiduquesa María-Cristina de Austria-Lorena y tuvo dos hijas.
La viuda el rey decide deshacerse del anillo que tantos estragos le ha causado a su familia, no sin antes bendecirlo previamente, o sea, el ópalo fue reconvertido en un colgante y dado como ofrenda a Nª.Sra. de La Almudena.
Ahora puede verse en el Museo de la Catedral de Madrid, encerrada en una cajita dorada, pues así en el dorso del recipiente, puede leerse el siguiente lema: “Esta sortija perteneció a la reina Mercedes, a la reina María Cristina, a la infanta Cristina, a la infanta Pilar y al rey Alfonso XII». Y en la parte trasera: «Después del fallecimiento de estas Augustas Personas, la Familia real la donó a la Sagrada Imagen de Santa María de la Almudena. 29 de noviembre de 1885”.
Fuente: https://nueve25plata.com.mx/blog/2019/11/19/joyas-malditas-el-opalo-que-ensombrecio-la-monarquia-espanola/